Experiencias menstruales y aceptabilidad de una intervención sobre equidad menstrual en adolescentes en Cataluña

Menstrual experiences and acceptability of a menstrual equity intervention among adolescents in Catalonia (Spain)

Andrea García-Egea Tomàs López-Jiménez Constanza Jacques-Aviñó Anna María Morero-Beltrán Aina Pi-Sánchez Cristina Martínez-Bueno Neus Carrilero-Carrió Anna Berenguera Laura Medina-Perucha Acerca de los autores

Resumen

Objetivo:

Explorar los conocimientos menstruales, el manejo menstrual, el uso de productos menstruales y la prevalencia de la pobreza menstrual, y evaluar la aceptabilidad de una intervención de equidad menstrual en el alumnado de cuarto curso de Educación Secundaria Obligatoria en Cataluña.

Método:

Estudio de metodología mixta posintervención (estudio transversal y estudio cualitativo con grupos de discusión) con perspectiva crítica y de género. Se llevó a cabo entre julio de 2022 y marzo de 2023. Se realizaron análisis estadísticos descriptivos y bivariados estratificados por género. Los datos cualitativos se analizaron mediante análisis temático.

Resultados:

Participaron 828 jóvenes (53,4% mujeres) entre 14 y 18 años (media: 15,1). Las mujeres y las personas menstruantes valoraron favorablemente el taller, y algunos hombres mostraron resistencias. Este motivó el uso de algunos productos menstruales reutilizables, aunque se identificaron reticencias con la copa menstrual. Las participantes indicaron barreras para el manejo menstrual en el entorno escolar y el 19,4% dejó de asistir al instituto durante la menstruación en los 6 meses previos al estudio. El 10,9-16,4% reportaron pobreza menstrual en los 6 meses previos al estudio y el 29,0% tomaron acciones para reducir el impacto medioambiental de los productos menstruales.

Conclusiones:

Este estudio señala la necesidad de codiseñar con el alumnado intervenciones en educación menstrual que consideren las dinámicas de género y las actitudes machistas, así como orientarlas al profesorado. La provisión de productos menstruales reutilizables puede ser útil para promover su utilización, aunque debe ofrecerse un acompañamiento. Es necesario reforzar la educación menstrual, reducir la pobreza menstrual y disminuir el absentismo escolar durante la menstruación.

Palabras clave:
Menstruación; Salud menstrual; Inequidad menstrual; Manejo menstrual; Adolescente; Género; Metodología mixta

Abstract

Objective:

To explore menstrual knowledge, menstrual management, the use of menstrual products, the prevalence of menstrual poverty and to assess the acceptability of a menstrual equity intervention among students in the fourth grade of compulsory secondary education in Catalonia (Spain).

Method:

Post-intervention mixed-methods study (cross-sectional study and qualitative study with focus groups) with a critical and gender perspective. It was conducted between July 2022 and March 2023. Descriptive and bivariate statistical analyses stratified by gender were carried out. Qualitative data were analysed using thematic analysis.

Results:

Women and people who menstruate rated the intervention favourably, while some men were reluctant. The intervention promoted the use of some reusable menstrual products, although some barriers to use menstrual cups were identified. Participants reported institutional barriers to menstrual management in the school setting and 19.4% stopped attending school during menstruation in the 6 months prior to the study. Between 10.9-16.4% reported menstrual poverty in the 6 months prior to the study, and 29,0% took actions to reduce the environmental impact of menstrual products.

Conclusions:

This study highlights the need for co-designing menstrual interventions that consider gender dynamics and sexist attitudes with students, as well as targeting it to teachers. The provision of reusable menstrual products can be helpful in promoting their use, although accompaniment should be provided. In parallel, it is crucial to strengthen menstrual education, as well as to reduce menstrual poverty and school absenteeism during menstruation.

Keywords:
Menstruation; Menstrual health; Menstrual inequity; Menstrual management; Adolescent; Gender; Mixed methods

Introducción

Estudios previos han señalado la necesidad de abordar la inequidad menstrual y promover la salud menstrual desde un marco de inequidades sociales en salud y de justicia social11. Bobel C, Winkler IT, Fahs B, et al. The Palgrave Handbook of critical menstruation studies. Singapore: Springer; 2020.

2. Weiss-Wolf J. Periods gone public. Taking a stand for menstrual equity. New York: Arcade; 2017.
-33. Johnson M. Menstrual justice. UC Davis Law Review. 2019;53:1-79.. Estos abordajes permiten atender a la salud física, emocional y social desde una perspectiva de crítica y de género44. Blázquez Rodríguez M, Bolaños Gallardo E. Aportes a una antropología feminista de la salud: el estudio del ciclo menstrual. Salud Colect. 2017;13:253-65.. La inequidad menstrual se define como las diferencias sistemáticas, injustas y evitables en el acceso a la atención sanitaria para la salud menstrual, a la educación menstrual, a productos menstruales, servicios y espacios para el manejo menstrual, a experiencias de estigma y discriminación menstrual, y a barreras en la participación social, comunitaria y política por tener el ciclo menstrual y menstruar55. Medina-Perucha L, López-Jiménez T, Jacques-Aviñó C, et al. Menstruation and social inequities in Spain: a cross-sectional online survey-based study. Int J Equity Health. 2023;22:92.,66. Holst AS, Jacques-Aviñó C, Berenguera A, et al. Experiences of menstrual inequity and menstrual health among women and people who menstruate in the Barcelona area (Spain): a qualitative study. Reprod Health. 2022;19:45.. Las personas que menstrúan (PM) son aquellas personas que tienen un ciclo menstrual y menstruación, pero identifican su género diferente de mujer. El estúdio Equidad y Salud Menstrual en España indica que entre el 22,2% y el 39,9% de las mujeres y PM adultas han vivido situaciones de pobreza menstrual en algún momento de su ciclo vital55. Medina-Perucha L, López-Jiménez T, Jacques-Aviñó C, et al. Menstruation and social inequities in Spain: a cross-sectional online survey-based study. Int J Equity Health. 2023;22:92.. Las investigaciones previas han visibilizado las dificultades para el manejo menstrual, especialmente en espacios públicos77. Sommer M, Hirsch JS, Nathanson C, et al. Comfortably, safely, and without shame: defining menstrual hygiene management as a public health issue. Am J Public Health. 2015;105:1302-11., así como la falta de educación menstrual, el tabú, el estigma y la discriminación menstrual en nuestra sociedad88. Botello Hermosa A, Casado Mejía R. Significado cultural de la menstruación en mujeres españolas. Ciencia y Enfermería. 2017;23:89-97.,99. Johnston-Robledo I, Chrisler JC. The Menstrual Mark: menstruation as social stigma. En: Bobel C, Winkler IT, Fahs B, et al., editors. The Palgrave Handbook of critical menstruation studies. Singapore: Springer; 2020. p. 181-99.. El absentismo menstrual, tanto laboral como escolar, también está presente en España55. Medina-Perucha L, López-Jiménez T, Jacques-Aviñó C, et al. Menstruation and social inequities in Spain: a cross-sectional online survey-based study. Int J Equity Health. 2023;22:92.,66. Holst AS, Jacques-Aviñó C, Berenguera A, et al. Experiences of menstrual inequity and menstrual health among women and people who menstruate in the Barcelona area (Spain): a qualitative study. Reprod Health. 2022;19:45..

Recientemente se han iniciado acciones comunitarias y políticas para promover la salud de las mujeres y PM1010. Hennegan J. Interventions to improve menstrual health in lowand middle-income countries: do we know what works? En: Bobel C, Winkler IT, Fahs B, et al., editors. The Palgrave Handbook of critical menstruation studies. Singapore: Springer; 2020. p. 637-52.,1111. Guilló-Arakistain M. Transformaciones y retos epistemológicos, políticos y sociales en las culturas alternativas menstruales. RECERCA Rev Pens An. 2022;27.. Algunas intervenciones realizadas en otros países han fomentado la educación menstrual y el acceso a productos menstruales, con el objetivo de promover la salud menstrual y reducir el absentismo escolar1010. Hennegan J. Interventions to improve menstrual health in lowand middle-income countries: do we know what works? En: Bobel C, Winkler IT, Fahs B, et al., editors. The Palgrave Handbook of critical menstruation studies. Singapore: Springer; 2020. p. 637-52.. Las políticas menstruales deben tener en cuenta las causas de las inequidades menstruales (p. ej., inequidades de género) en el diseño de políticas y de intervenciones para reducir el estigma menstrual1212. Alhelou N, Kavattur PS, Rountree L, et al. 'We like things tangible': a critical analysis of menstrual hygiene and health policy-making in India, Kenya, Senegal and the United States. Glob Public Health. 2022;17:2690-703..

La Generalitat de Catalunya ha puesto en marcha una estrategia para promocionar la equidad menstrual, enmarcada en la Estrategia Nacional de Derechos Sexuales y Reproductivos, coordinada por el Departament d‘Igualtat i Feminismes y trabajada de manera interdepartamental, especialmente con el Departament de Salut. La estrategia de equidad menstrual La meva regla, les meves regles (Mi regla, mis reglas) ha sido la primera por parte de una institución de gobierno en España con el objetivo de fomentar la educación menstrual y el uso de productos menstruales reutilizables, y reducir la pobreza menstrual, entendida como las dificultades económicas para el acceso a productos menstruales1313. Crichton J, Okal J, Kabiru CW, et al. Emotional and psychosocial aspects of menstrual poverty in resource-poor settings: a qualitative study of the experiences of adolescent girls in an informal settlement in Nairobi. Health Care Women Int. 2013;34:891-916.. Con tal propósito, se llevó a cabo una primera fase piloto de la intervención en 24 Institutos de Educación Secundaria (IES) en Cataluña con alumnado de tercer curso de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) (Fig. 1).

Figura 1.
Esquema informativo de la intervención La meva regla, les meves regles.

El objetivo del estudio fue explorar los conocimientos menstruales, el manejo menstrual, el uso de productos menstruales y la prevalencia de la pobreza menstrual, y evaluar la aceptabilidad de una intervención de equidad menstrual en el alumnado de cuarto curso de ESO en Cataluña.

Método

Estudio de metodología mixta posintervención (estudio transversal y estudio cualitativo) fundamentado en principios de equidad en salud y en perspectiva crítica y de género. Se realizó entre julio de 2022 y marzo de 2023. Fue aprobado por el Comité de Ética en Investigación del [IDIAPJGol] el 29 de julio de 2022 (22/151-P). Todas las personas participantes dieron su consentimiento informado. Se utilizaron las herramientas STROBE1414. Elm E von, Altman DG, Egger M, et al. Strengthening the reporting of observational studies in epidemiology (STROBE) statement: guidelines for reporting observational studies. BMJ. 2007;335:806-8. y COREQ1515. Tong A, Sainsbury P, Craig J. Consolidated criteria for reporting qualitative research (COREQ): a 32-item checklist for interviews and focus groups. Int J Qual Heal care. 2007;19:349-57. para guiar y comunicar la investigación (véanse Apéndices 1 y 2 del Material Suplementario).

Los criterios de inclusión para el estudio cuantitativo y cualitativo fueron: 1) ser estudiante de un centro participante en la intervención, y 2) haber participado en la intervención en mayo de 2022.

Estudio cuantitativo

1) Participantes, muestreo y reclutamiento

Se estimó una medida muestral de 748 participantes (374 mujeres/PM y 374 hombres/personas que no menstrúan (PNM)) con el fin de garantizar la potencia estadística para lograr los objetivos (Alpha = 0,05, correlación intraclase de 0,01 y diferencias de género mayores del 8%).

El muestreo fue no probabilístico e intencionado. Participaron 17 de los 24 IES que habían participado en la intervención en mayo de 2022. Aunque se envió el cuestionario a los 24 IES, finalmente participaron 17, probablemente debido a dificultades para coordinar la recogida de cuestionarios en las aulas. El cuestionario fue administrado en las aulas formadas por alumnado que hubiese participado en la intervención en mayo de 2022. En este caso, fueron aulas de cuarto curso de ESO. El reclutamiento fue coordinado por el Departament d’Educació.

2) Materiales y variables

Se administró un cuestionario online (plataforma LimeSurvey) entre el 14 de noviembre y el 23 de diciembre de 2022, que fue elaborado por el equipo de investigación teniendo en cuenta los objetivos del estudio, la evidencia disponible, así como la propia experiencia en el ámbito de investigación. Fue pilotado presencialmente antes de su utilización con dos alumnas no vinculadas a ninguno de los centros participantes en la intervención. La duración aproximada de autocumplimentación fue de 30 minutos. El cuestionario se administró en los IES, guiado por el profesorado.

Se recogieron variables sociodemográficas: edad (14, 15, 16, 17, 18 años), género (mujer, hombre, no binario/otros), IES (24 institutos participantes), población de residencia (todos los municipios de Cataluña), país de nacimiento (Cataluña, España, fuera de España), composición familiar (madre o persona tutora 1, padre o persona tutora 2, pareja de padre/madre, hermanas/os, abuelas/os, centro de residencia de menores, otros), nivel de estudios de las personas cuidadoras (sin estudios, estudios primarios, estudios secundarios, estudios universitarios) y situación laboral de las personas cuidadoras (trabajo a tiempo parcial/completo y autónomas/os, sin empleo o jubilación, estudiantes, tareas de cuidado en casa). Se utilizaron cinco preguntas para construir el índice FAZ (Family Affluence Scale), herramienta validada para identificar y categorizar el nivel socioeconómico familiar en bajo, medio o alto1616. Currie C, Molcho M, Boyce W, et al. Researching health inequalities in adolescents: the development of the Health Behaviour in School-Aged Children (HBSC) Family Affluence Scale. Soc Sci Med. 2008;66:1429-36..

Otras variables recogidas fueron las informaciones y creencias menstruales (afirmaciones en relación a la menstruación y el dolor menstrual), las acciones llevadas a cabo después del taller (buscar más información sobre el ciclo menstrual, usar productos menstruales reutilizables, conversar con amistades/pareja sobre el ciclo menstrual, registrar el propio ciclo menstrual, realizar consultas a servicios sanitarios), la percepción de tabú, estigma y discriminación menstrual (recibir comentarios negativos por parte de compañeros/as de clase por menstruar), el manejo menstrual (comodidad cambiándose los productos menstruales en el instituto, los espacios públicos y en casa), el uso de productos menstruales (compresas de tela, copa menstrual, bragas menstruales, esponjas menstruales, tampones, compresas de un solo uso, pañales, papel higiénico, más de una braga, sangrado libre, otros), las percepciones sobre los productos menstruales reutilizables (satisfacción con la copa menstrual, satisfacción con las compresas de tela, satisfacción con las bragas menstruales) y el impacto medioambiental de los productos menstruales (uso de productos reutilizables, uso de detergentes ecológicos, uso de lavadoras a temperaturas frías, secado al aire y al sol), la prevalencia de la pobreza menstrual (problemas económicos para comprar productos menstruales, problemas económicos para poder comprar los productos menstruales de preferencia, uso de productos menstruales más tiempo del recomendable debido a problemas económicos) y la participación social durante la menstruación (menor atención en clase durante la menstruación, dejar de ir al instituto durante la menstruación, dejar de quedar con amistades, dejar de hacer deporte). Quienes menstruaron en algún momento de su vida respondieron todas las preguntas; quienes no, únicamente contestaron a las preguntas relativas a las acciones llevadas a cabo después del taller y las informaciones y creencias menstruales.

3) Análisis de los datos

Las variables continuas se describieron como media y desviación estándar. Las variables categóricas se describieron como número y porcentaje. Para evaluar las diferencias entre los grupos se aplicó la prueba de ji al cuadrado. La significación estadística se definió como 0,05. Los análisis bivariados se estratificaron por nivel socioeconómico y género (solo se realizaron con las categorías «mujer» y «hombre», dado que la representación de las personas no binarias era baja y no comparable estadísticamente con las anteriores categorías). Los análisis se realizaron con el programa SPSS 25.0 (SPSS Inc., Arkmonk, NY: IBM Corp). Las preguntas de texto abierto (experiencias con copa menstrual, compresas de tela y bragas menstruales) se analizaron mediante análisis de contenido1717. Hsieh HF, Shannon SE. Three approaches to qualitative content analysis. Qual Health Res. 2005;15:1277-88..

Estudio cualitativo

1) Participantes, muestreo y reclutamiento

El muestreo se realizó en dos fases. En primer lugar, se seleccionaron los centros educativos siguiendo criterios de accesibilidad y voluntariedad. La selección de los centros fue gestionada desde el Departament d‘Educació. Participaron dos centros involucrados en la intervención de mayo de 2022: uno de nivel socioeconómico medio-alto (centro 1) y otro de nivel socioeconómico bajo (centro 2). En segundo lugar, el profesorado reclutó al alumnado de manera intencional, aunque el equipo investigador proporcionó la pauta del número mínimo y máximo de participantes para conformar los grupos de discusión. Además, el alumnado debía haber participado en la intervención y manifestar interés en formar parte del estudio cualitativo.

2) Recogida de los datos

Se llevaron a cabo cuatro grupos de discusión (dos con mujeres/PM y dos con hombres/PNM) en dos IES. Los grupos de discusión se realizaron el 17 y el 23 de noviembre de 2022 (centro 1 y centro 2, respectivamente). Los grupos de discusión de mujeres y PM contaron con la participación de 9 (centro 1) y 12 (centro 2) personas. En los grupos con hombres participaron 6 (centro 1) y 5 (centro 2) estudiantes.

Los grupos, realizados presencialmente en un aula de cada IES, duraron entre 70 y 90 minutos (mujeres/PM) y entre 33 y 48 minutos (hombres), y se grabaron en audio. Se utilizaron dos guiones temáticos, elaborados por el equipo de investigación, para cada grupo de participantes (véase Apéndice 3 en el Material Suplementario).

3) Análisis de los datos

Los datos se analizaron mediante análisis temático1818. Braun V, Clarke V. Using thematic analysis in psychology. Qual Res Psychol. 2006;3:77-101.. Primeramente se transcribieron los grupos de discusión, para luego proceder a la familiarización de los datos. Los siguientes pasos fueron: 1) codificación, 2) generación inicial de categorías/subcategorías, 3) definición de categorías/subcategorías, y 4) escritura del análisis. Se llevó a cabo la triangulación entre tres miembros del equipo investigador para consensuar las categorías y subcategorías finales. El análisis se realizó separadamente para los dos grupos participantes (mujeres/PM y hombres).

Resultados

Estudio cuantitativo

Participaron 828 estudiantes (53,4% mujeres). El 86,8% habían nacido en Cataluña y el 68,1% eran de nivel socioeconómico medio (Tabla 1).

Tabla 1.
Características sociodemográficas de las personas participantes en el estudio cuantitativo, estratificadas por identidad de género.

La familia, la escuela y las amistades fueron las fuentes principales de información menstrual. Las mujeres aprendieron principalmente de sus familias (89,3%), mientras que los hombres lo hicieron en la escuela (79,9%) (Tabla 2).

Tabla 2.
Fuentes de información menstrual, creencias menstruales y acciones llevadas a cabo después del taller en el total de participantes, estratificado por identidad de género.

El alumnado aún tenía arraigadas ciertas creencias sobre la menstruación después del taller, siendo estas más prevalentes en los hombres. Por ejemplo, el 18,7% de los hombres pensaban que el dolor menstrual impedía ir a la escuela, mientras que un 10,9% de las mujeres creía esto como cierto (Tabla 2). Después del taller, las mujeres conversaron más con su entorno sobre la menstruación (48,7%), mientras que los hombres fueron más proclives a no haber explorado más (33,2%). El 14,8% reportaron haber recibido comentarios negativos relacionados con la menstruación por parte de compañeros/as de la escuela tras el taller (Tabla 3).

Tabla 3.
Uso de productos menstruales, experiencia con los productos menstruales, experiencias de pobreza menstrual, comodidad para el manejo menstrual, acciones para mitigar el impacto medioambiental, participación social y educativa, y comentarios negativos por tener la menstruación entre las mujeres y personas que menstrúan después de la intervención.

El 30,1% de las mujeres y personas menstruantes usaban productos menstruales reutilizables después del taller, siendo las bragas menstruales el producto más satisfactorio (35,2%) (Tabla 3). Las experiencias según cada producto menstrual reutilizable se recogen en la tabla 3. Un 29,0% llevaban a cabo alguna acción para mitigar el impacto medioambiental de los productos menstruales. El espacio para el manejo menstrual más cómodo para las mujeres y PM fue el hogar (90,3%) (Tabla 3). El 10,9-16,4% de las mujeres y PM reportaron haber vivido situaciones de pobreza menstrual en los 6 meses previos al estudio (Tabla 3). El 19,4% reportaron absentismo escolar durante la menstruación en los 6 meses previos al estudio (Tabla 3). No se observaron diferencias según el nivel socioeconómico.

Estudio cualitativo en mujeres/personas que menstrúan

Participaron 20 mujeres y una PM (15 años). La mayoría habían nacido en Cataluña (Tabla 4). Del análisis surgieron seis categorías, que profundizan en la información menstrual recibida, las actitudes de los hombres hacia la menstruación, las percepciones sobre los productos menstruales, la gestión del dolor menstrual, las experiencias para el manejo menstrual en el entorno escolar y la propuesta de acciones menstruales (Tabla 5).

Tabla 4.
Características sociodemográficas de las personas participantes en el estudio cualitativo (n = 32).

Tabla 5.
Ejemplos de citas que conforman los temas del análisis cualitativo en mujeres y personas que menstrúan y en hombres.

1) «Hay mucha confusión»: falta de información menstrual

Las participantes percibieron que el taller aportaba nueva información menstrual (p. ej., sobre mitos menstruales). Sin embargo, manifestaron la necesidad de recibir dicha formación en espacios educativos en etapas más tempranas, además de profundizar en la relación de la sexualidad con el ciclo menstrual y en los posibles cambios anímicos durante el ciclo menstrual.

2) «Si no entienden qué es la regla, es fácil reírse»: tabú, estigma y discriminación menstrual

Las participantes comentaron no haber notado un cambio real en las actitudes de sus compañeros después del taller, pues siguieron recibiendo comentarios estigmatizantes sobre la menstruación. Esto impactó en algunas estudiantes, por ejemplo, manifestando vergüenza por manchar su ropa en público. Por eso, consideraron relevante seguir impartiendo talleres menstruales para sus compañeros.

3) «He visto muchos casos de chicas que se lo tomaban porque era lo que tocaba»: la medicalización de la menstruación

La opción más habitual para gestionar el dolor menstrual fue mediante fármacos, aunque algunas participantes del centro 1 manifestaron reticencias por el posible impacto en su salud. Sin embargo, las participantes del centro 2 parecían tener más integrado el uso de fármacos para gestionar la menstruación. Aun así, todas solicitaron que futuras intervenciones educativas facilitaran vías alternativas para gestionar el dolor menstrual.

4) «Nos han hecho experimentar productos que no eran las compresas típicas»: preferencias y retos en el uso de productos menstruales

En general, las participantes percibieron el taller como satisfactorio por la disposición de productos menstruales reutilizables gratuitos. Aun así, algunas participantes expresaron dificultades y molestias con el uso de la copa menstrual, incidiendo en que futuros talleres explicasen cómo usarla. Las bragas menstruales fueron mejor valoradas, aunque manifestaron utilizarlas exclusivamente para dormir, debido a preocupaciones en relación a la retención del sangrado. Las compresas reutilizables generalmente no gustaban por ser incómodas para realizar actividades cotidianas.

5) «Me levanto y pienso: ¿tengo que ir al instituto con la regla?»: vivencias menstruales en el entorno escolar

Las participantes mencionaron la desconsideración de las vivencias menstruales por parte del sistema educativo y de algunos docentes. Generalmente, los baños no contaban con los elementos necesarios para poder gestionar la menstruación (p. ej., papel higiénico) y a menudo tenían dificultades para acceder a los baños (p. ej., tenían que solicitar el acceso porque estaban cerrados con llave). Las participantes comentaron que el taller no sirvió para sensibilizar al profesorado y a los equipos directivos.

6) «Mi miedo era me compro la copa y me gasto 20 euros»: acciones para abordar la pobreza menstrual y el impacto medioambiental de los productos menstruales

Las participantes propusieron políticas como la gratuidad o la reducción del precio de los productos menstruales, sobre todo los reutilizables. Algunas participantes expresaron preocupaciones acerca del impacto ambiental de los productos menstruales. Por ello, algunas consideraban pertinente fomentar el uso de productos menstruales reutilizables.

Estudio cualitativo en hombres

Participaron 11 hombres (1 autoidentificado como «macho») de entre 14 y 16 años, la mayoría nacidos en Cataluña (Tabla 4). Del análisis surgieron cinco categorías que recogen la experiencia de participación en el taller, las dificultades para entablar conversaciones sobre la menstruación con mujeres, la concepción de las mujeres cuando menstrúan, la vivencia de las relaciones sexuales durante la menstruación y la posición de los hombres respecto a la equidad menstrual. Las citas se recogen en la tabla 5.

1) «No era para nosotros, estábamos un poco aparte»: percepciones de exclusión y aprendizajes menstruales

Los alumnos mostraron resistencias hacia el taller; principalmente comentaban haberse sentido excluidos por estar enfocado hacia las mujeres y PM. La mayoría comentaban que el taller no les había servido para disponer de más información. Aun así, tampoco supieron identificar qué información les faltaba, además de opciones para sentirse más incluidos en el taller.

2) «Ellas tienen miedo de hablar con nosotros»: menstruación y dificultades relacionales

Los alumnos expresaron las dificultades que sentían para entablar una conversación con sus compañeras. Además, comentaron que el taller no les había ofrecido herramientas para relacionarse mejor con mujeres y PM, aunque muchos expresaron no estar interesados en hablar sobre la menstruación.

3) «Son raras, son bipolares»: concepción estigmatizante y discriminatoria de las mujeres y PM

Algunos participantes expresaron actitudes estigmatizantes y discriminatorias hacia las mujeres y PM, especialmente en el centro 2. En algunos casos eran consideradas como «agresivas», «mentirosas» y «exageradas» cuando menstruaban. Sin embargo, algunos participantes parecían no estar de acuerdo con estos discursos, aunque no expresaron notoriamente su opinión. Los discursos imperantes fueron aquellos que problematizaban la menstruación.

4) «Lo utilizan como excusa»: la menstruación como interferencia en las relaciones sexuales

Los participantes comentaron que únicamente se podían tener relaciones sexuales durante la menstruación si era una relación sexoafectiva con cierta solidez y confianza. Además, un par de participantes del centro 2 expresaron rabia cuando una mujer se negaba a mantener relaciones sexuales, ya que percibían la menstruación como «una excusa».

5) «Nosotros también queremos saber cómo ayudar»: el rol de los hombres en la equidad menstrual

Algunos participantes, especialmente del centro 1, consideraron que debían «empatizar» con las mujeres y personas menstruantes, aunque no sabían de qué manera podían hacerlo. Por ello, señalaron la necesidad en futuros talleres de brindar herramientas para saber cómo actuar. Otros hombres no se sentían interpelados y consideraban no necesitar estos recursos.

Discusión

El estudio halló que las mujeres y PM respondieron positivamente al taller y mostraron interés en explorar el tema y utilizar productos menstruales reutilizables. Sin embargo, persistieron reticencias hacia ciertos productos, como la copa menstrual. La pobreza menstrual estaba presente en el 10,9-16,4% de las participantes. Abordar las barreras en el entorno escolar para manejar la menstruación fue crucial para las participantes. Por otra parte, los hombres se habían sentido excluidos del taller. Las concepciones y actitudes estigmatizantes y discriminatorias, así como las resistencias hacia el desarrollo del taller, fueron observadas principalmente en los hombres.

Si bien las intervenciones multicomponente (p. ej., que incluyan educación menstrual1919. Hennegan J, Montgomery P. Do menstrual hygiene management interventions improve education and psychosocial outcomes for women and girls in low and middle income countries? A systematic review. PLoS One. 2016;11, e0146985.

20. Montgomery P, Hennegan J, Dolan C, et al. Menstruation and the cycle of poverty: a cluster quasi-randomised control trial of sanitary pad and puberty education provision in Uganda. PLoS One. 2016;11, e0166122.
-2121. Hennegan J, Dolan C, Steinfield L, et al. A qualitative understanding of the effects of reusable sanitary pads and puberty education: implications for future research and practice. Reprod Health. 2017;14(1.). y provisión de productos menstruales2121. Hennegan J, Dolan C, Steinfield L, et al. A qualitative understanding of the effects of reusable sanitary pads and puberty education: implications for future research and practice. Reprod Health. 2017;14(1.).,2222. Austrian K, Kangwana B, Muthengi E, et al. Effects of sanitary pad distribution and reproductive health education on upper primary school attendance and reproductive health knowledge and attitudes in Kenya: a cluster randomized controlled trial. Reprod Health. 2021;18:1-13.) han resultado ser efectivas1010. Hennegan J. Interventions to improve menstrual health in lowand middle-income countries: do we know what works? En: Bobel C, Winkler IT, Fahs B, et al., editors. The Palgrave Handbook of critical menstruation studies. Singapore: Springer; 2020. p. 637-52., no han demostrado tener una efectividad concluyente en minimizar el estigma y la discriminación menstrual2020. Montgomery P, Hennegan J, Dolan C, et al. Menstruation and the cycle of poverty: a cluster quasi-randomised control trial of sanitary pad and puberty education provision in Uganda. PLoS One. 2016;11, e0166122.. Abordar los determinantes fundacionales de la inequidad menstrual, así como los roles y las normas de género, es imperativo para el desarrollo de intervenciones efectivas44. Blázquez Rodríguez M, Bolaños Gallardo E. Aportes a una antropología feminista de la salud: el estudio del ciclo menstrual. Salud Colect. 2017;13:253-65.,2222. Austrian K, Kangwana B, Muthengi E, et al. Effects of sanitary pad distribution and reproductive health education on upper primary school attendance and reproductive health knowledge and attitudes in Kenya: a cluster randomized controlled trial. Reprod Health. 2021;18:1-13.. Las intervenciones deberían seguir incluyendo a hombres y personas no menstruantes, ya que su participación podría contribuir a evitar perpetuar las actitudes discriminatorias ejercidas hacia las mujeres y PM2323. Allen KR, Kaestle CE, Goldberg AE. More than just a punctuation mark: how boys and young men learn about menstruation. J Fam Issues. 2010;32:129-56.. Aun así, es necesario profundizar en las resistencias de los hombres y PNM para erradicar las contrarreacciones a las intervenciones de género2424. Johansson K, Andersson E, Johansson M, et al. The discursive resistance of men to gender-equality interventions: negotiating "unjustness" and "unnecessity" in Swedish forestry. Men Masculinities. 2017;22:177-96. (p. ej., que se pueden traducir en un aumento de actitudes y violencias machistas), y así potenciar su aceptabilidad y efectividad.

El contenido menstrual podría no estar integrado en el alumnado después de participar en el taller. Las mujeres y PM sugirieron profundizar en cuestiones como el uso de productos menstruales reutilizables, el dolor menstrual y los cambios emocionales durante el ciclo, y algunos hombres en poder mejorar las habilidades comunicativas con sus compañeras. Siguiendo el modelo del taller, futuras intervenciones deberían seguir abarcando una perspectiva que trascienda del modelo biomédico, enmarcando la menstruación y el ciclo menstrual no solo como procesos fisiológicos, sino también como procesos sociales, además de estar adaptadas a la diversidad de experiencias menstruales88. Botello Hermosa A, Casado Mejía R. Significado cultural de la menstruación en mujeres españolas. Ciencia y Enfermería. 2017;23:89-97.,2525. Shannon AK, Melendez-Torres GJ, Hennegan J. How do women and girls experience menstrual health interventions in low-and middle-income countries? Insights from a systematic review and qualitative metasynthesis. Cult Health Sex. 2021;23:624-43.,2626. Thapa S, Aro AR. 'Menstruation means impurity': multilevel interventions are needed to break the menstrual taboo in Nepal. BMC Womens Health. 2021;21:1-5..

Los productos menstruales insertables, en consonancia con la literatura previa, generaron reticencias por posibles dificultades en la inserción y la extracción, el dolor vaginal o vulvar durante y tras su uso, y la preocupación por experimentar pérdidas de flujo menstrual2727. Van Eijk AM, Jayasinghe N, Zulaika G, et al. Exploring menstrual products: a systematic review and meta-analysis of reusable menstrual pads for public health internationally. PLoS One. 2021;16, e0257610.,2828. Medina-Perucha L, López-Jiménez T, Holst AS, et al. Use and perceptions on reusable and non-reusable menstrual products in Spain: a mixed-methods study. PLoS One. 2022;17, e0265646..

El impacto medioambiental de los productos menstruales ha sido señalado por académicas y activistas menstruales2929. Peberdy E, Jones A, Green D. A study into public awareness of the environmental impact of menstrual products and product choice. Sustainability. 2019;11:473.. Aunque un 29,0% de las participantes llevaban a cabo acciones para mitigar este impacto, expresaron cierto malestar por su conciencia medioambiental cuando usaban productos no reutilizables. Esto apunta hacia la necesidad de promover el uso de productos reutilizables, pero respetando las decisiones individuales de elección de productos menstruales66. Holst AS, Jacques-Aviñó C, Berenguera A, et al. Experiences of menstrual inequity and menstrual health among women and people who menstruate in the Barcelona area (Spain): a qualitative study. Reprod Health. 2022;19:45.,2727. Van Eijk AM, Jayasinghe N, Zulaika G, et al. Exploring menstrual products: a systematic review and meta-analysis of reusable menstrual pads for public health internationally. PLoS One. 2021;16, e0257610..

La pobreza menstrual fue reportada por el 10,9-16,4% de las participantes en los 6 meses previos al estudio; resultados similares a los encontrados en otros estudios de Estados Unidos3030. Cardoso LF, Scolese AM, Hamidaddin A, et al. Period poverty and mental health implications among college-aged women in the United States. BMC Womens Health. 2021;21:1-7. y de España3131. Marí-Klose M, Julià A, Escapa S, et al. Period poverty and mental health in a representative sample of young women in Barcelona, Spain. BMC Womens Health. 2023;23:1-9.. Aunque las acciones centradas en suministrar productos menstruales gratuitos pueden contribuir a erradicar la pobreza menstrual, es crucial implementar acciones políticas que manejen de manera estructural la pobreza y la vulnerabilidad socioeconómica55. Medina-Perucha L, López-Jiménez T, Jacques-Aviñó C, et al. Menstruation and social inequities in Spain: a cross-sectional online survey-based study. Int J Equity Health. 2023;22:92..

Las barreras en el entorno escolar (p. ej., falta de acceso a espacios y elementos para el manejo menstrual) y la desconsideración de la menstruación por parte del profesorado dificultan el manejo menstrual. Los estudios previos han mostrado las dificultades que viven las mujeres y PM en el entorno escolar, señalando la falta de apoyo por parte del profesorado. Las dificultades escolares reportadas en nuestro estudio sugieren la perpetuación del estigma y la discriminación menstrual institucional, así como el impacto que tiene en la salud emocional1919. Hennegan J, Montgomery P. Do menstrual hygiene management interventions improve education and psychosocial outcomes for women and girls in low and middle income countries? A systematic review. PLoS One. 2016;11, e0146985.. Además, las dificultades para manejar la menstruación en el entorno escolar contribuyen a la reducción de la participación en las actividades escolares y al absentismo escolar, que en nuestro estudio fue del 19,4%. Esto tiene implicaciones en el aumento del abandono escolar, así como un impacto en las trayectorias vitales (p. ej., disminución de la participación educativa y social)3232. Gottfried MA. Chronic absenteeism and its effects on students' academic and socioemotional outcomes. J Educ Students Placed Risk. 2014;19:53-75..

Por último, es importante considerar las limitaciones de este estudio. Otras metodologías (p. ej., estudio no experimental pre/posintervención) podrían haber proporcionado un análisis más profundo del ámbito de estudio, pero no pudieron llevarse a cabo por limitaciones temporales y de recursos. Otra limitación resultó de una falta de seguimiento de las indicaciones para la recogida de datos en algunos centros educativos (p. ej., administrar únicamente el cuestionario a mujeres y PM). Otra limitación podría ser la falta de datos y de profundidad en relación con la aceptabilidad de la intervención. Aun así, los resultados son útiles para la mejora del diseño y la implementación del taller, así como para guiar futuras acciones políticas y para la mejora de los sistemas sociosanitarios y educativos en Cataluña.

Conclusiones

El taller fue valorado de manera diferente entre el alumnado, siendo innovador y satisfactorio para las mujeres, mientras que los hombres se sintieron excluidos. Después del taller, algunas informaciones menstruales podrían no estar consolidadas, sobre todo en los hombres. Además, los comentarios menstruales discriminatorios hacia las mujeres y PM seguían vigentes. El uso de productos menstruales incluía opciones reutilizables y no reutilizables, aunque algunas reutilizables generaban malestar durante su uso. También se observaron desafíos para el manejo menstrual en el entorno escolar. La pobreza menstrual se reportó en el 10,9 - 16,4% de las mujeres y personas menstruantes en los 6 meses previos al estudio. Los resultados del presente estudio pueden ayudar a mejorar la implementación de futuras intervenciones, así como ofrecer una aproximación a la inequidad menstrual en adolescentes en Cataluña. Las intervenciones en equidad menstrual deberían implementarse en el currículo escolar y tener en un enfoque sistémico (p. ej., cómo operan las dinámicas y las violencias de género en el estigma y la discriminación menstrual). Además, las futuras intervenciones deberían incluir al profesorado y los equipos directivos. Las intervenciones deberían ofrecer espacios de acompañamiento para resolver preocupaciones del alumnado de manera dialógica. Por lo tanto, es imperativo que las intervenciones sean codiseñadas con el alumnado y otros agentes clave (p. ej., el profesorado). Debe producirse una transformación institucional para crear espacios en los centros educativos que faciliten el manejo menstrual y que aborden la pobreza menstrual y el presentismo/absentismo escolar.

¿Qué se sabe sobre el tema?

Las intervenciones en equidad menstrual han demostrado ser efectivas para potenciar el conocimiento menstrual, aunque el impacto en la participación escolar y las experiencias de estigma y discriminación menstrual no es concluyente.

¿Qué añade el estudio realizado a la literatura?

Identifica una mayor aceptación en la participación de un taller menstrual por parte de las mujeres y las PM, y reticencias de los hombres en estas intervenciones. El suministro de productos menstruales reutilizables puede motivar su uso, aunque persisten ciertas barreras para su uso. También evidencia las barreras para el manejo menstrual en el entorno escolar.

¿Cuáles son las implicaciones de los resultados obtenidos?

El codiseño de los talleres menstruales con el alumnado, las cuestiones relativas al género, el planteamiento de talleres multisesión y en edades tempranas son cuestiones a tener en cuenta para la aceptabilidad y la adecuación de las intervenciones. También es importante reforzar los contenidos y la información respecto a los productos menstruales para su uso.

Declaración de transparencia

La autora principal (garante responsable del manuscrito) afirma que este manuscrito es un reporte honesto, preciso y transparente del estudio que se remite a GACETA SANITARIA, que no se han omitido aspectos importantes del estudio, y que las discrepancias del estudio según lo previsto (y, si son relevantes, registradas) se han explicado.

Agradecimientos

El equipo de investigación quiere agradecer a todas las personas participantes en este estudio, así como al personal del Departament de Salut y del Departament d’Educació (Generalitat de Catalunya) que han contribuido para la ejecución de este proyecto. Por último, a Anna Moleras Serra por el apoyo técnico con la plataforma LimeSurvey.

Disponibilidad de bases de datos

Los datos no están disponibles en un repositorio público por cuestiones de confidencialidad y anonimidad. Se pueden obtener más detalles sobre los datos de manera justificada solicitándolos a la autora para correspondencia.

Anexo. Material adicional

Se puede consultar material adicional a este artículo en su versión electrónica disponible en doi: 10.1016/j.gaceta.2023.102415.

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  • Financiación

    Este proyecto ha sido financiado por el Institut Català de les Dones, en el marco del Pla d’Equitat Menstrual (ICD-2022-150).

Fechas de Publicación

  • Publicación en esta colección
    27 Ene 2025
  • Fecha del número
    2024

Histórico

  • Recibido
    26 Ene 2024
  • Acepto
    13 Jun 2024
Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS) Barcelona - Barcelona - Spain
E-mail: gs@elsevier.com